12/06/2024

El sistema ya fracasó en los ´90

El gobierno nacional anunció los vouchers de salud, un negocio privado financiado con fondos públicos

En un acto realizado en el municipio de San Nicolás, el gobierno nacional, con la presencia de Karina Milei, Martín Menem y el ministro de Salud, Mario Russo, presentó la implementación de los vouchers de salud, una iniciativa que retoma una antigua propuesta del Banco Mundial que fracasó en los años noventa.

El Seguro Médico Municipal, ahora rebautizado como “voucher de salud”, es una idea que busca subsidiar a la demanda, es decir, a la población sin cobertura, en lugar de a la oferta. Esta estrategia, promovida por el Banco Mundial en la década de los noventa como parte del avance neoliberal, tenía como objetivo reducir los costos de los sistemas de atención pública universal a través de planes de cobertura mínima focalizados en los sectores más desfavorecidos. Así lo explicó María Fernanda Boriotti, presidenta de Fesprosa.

Según Boriotti, la implementación de estos sistemas obligó al sector público a adaptarse y competir con el sector privado, resultando en diversos seguros para los más pobres. En Argentina, surgieron planes como el Plan Nacer o el Plan Sumar, mientras que en otros países de la región se implementaron sistemas similares. Todas estas iniciativas, según Boriotti, fracasaron como estrategias sanitarias, aunque beneficiaron a actores privados.

La dirigente gremial destacó que lo anunciado por el gobierno de Milei, en colaboración con la familia Pasagglia, no es novedoso. Durante la gestión de Ismael Pasagglia como Ministro de Salud, se redujo significativamente la planta del sector público de salud en la provincia de Buenos Aires. Ahora, con el congelamiento del presupuesto nacional de salud y de las transferencias a las provincias, que soportan el 90% de la infraestructura hospitalaria y de atención primaria, el sistema de salud y sus trabajadores están en una situación crítica.

El Grupo Oroño, conocido por su posición dominante como prestador médico privado, se perfila como el principal beneficiario de esta iniciativa, según advirtió Boriotti. Para ella, la falta de claridad sobre el origen de los fondos, el alcance y la integralidad de la cobertura, así como la estrategia de atención primaria, augura un fracaso similar al de las experiencias previas.En un contexto donde 20 millones de argentinos dependen exclusivamente del sector público de salud, fortalecer los 1700 hospitales y 6000 centros públicos sería la opción más eficiente y económica. “Todo lo demás es negocio”, concluyó Boriotti.
 

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