17/06/2021

Paritarias Prensa Escrita

El SiPreBA repudia otra paritaria a la baja

El Sindicato de Prensa de Buenos Aires repudió el “acuerdo” entre las empresas periodísticas de prensa escrita y la UTPBA, “quienes formalmente tienen el sello para la paritaria, pero sólo representan los intereses de las empresas”.

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Foto: 
SiPreBA

Luego de darse a conocer un “incremento” para los trabajadores y trabajadoras de prensa escrita que consiste en la mayoría de los casos en un del 30% fraccionado en tres cuotas de 10%, a cobrarse con los sueldos de septiembre, noviembre y enero de 2022, desde el SiPreBA denunciaron “un nuevo "acuerdo" a la baja e ilegítimo entre las cámaras y un sindicato sin representación”.

El sindicato advierte que la recomposición pactada por las cámaras AEDBA (que nuclea al diario Clarín, El Cronista La Nación, Perfil y Página/12, entre otros), AFERA, el sector de AAER y APTA, que reúnen a las revistas, y representantes de Infobae, Publirevistas S.A y las agencias internacionales ANSA y EFE cuenta en cada una de sus redacciones con asambleas y comisiones internas organizadas en el SiPreBA, sin embargo, “periodistas y trabajadores de prensa escrita no fuimos parte de la negociación”.

 Sin una representación real y legítima del sector gremial, la paritaria resulta una competencia entre las empresas por ver quién rebaja más los salarios”.

El comunicado del SiPreBA subraya que las empresas periodísticas de prensa escrita en la Ciudad de Buenos Aires cerraron la negociación paritaria 2021-2022 con un sindicato sin representación real a espaldas de las asambleas que deprecia el salario en prensa escrita.

Destacan la necesidad de que el SiPreBA sea parte de la negociación paritaria tras darse a conocer un acuerdo “insuficiente, regresivo y fuera de contexto” entendiendo que “no hay periodismo esencial si el sueldo no alcanza y genera prensa precarizada”.

Ponen como ejemplo la diferencia de las negociaciones llevadas adelante por la FATPREN con los medios de distintas provincias, con “instancias que cuentan con la participación tanto de las asambleas como de los plenarios de delegades y dirigentes. Incluso, a través de la Federación, la asamblea de Agencia Télam está en vías de cerrar su nueva pauta salarial”.

También, señala el sindicato, “en los canales de televisión, los acuerdos por empresa con las comisiones internas y asambleas del SiPreBA obtuvieron mejores resultados porcentuales frente a lo “negociado” en prensa escrita, por quienes formalmente tienen el sello para la paritaria, pero sólo representan los intereses de las empresas”.

Además, explican desde el Sindicato de los trabajadores y trabajadoras de Prensa de Buenos Aires, sobre el acuerdo alcanzado que:

  • La negociación consolida la pérdida acumulada en los sueldos del sector, que desde enero de 2017 han sufrido el recorte de un 42% en la capacidad de compra. Lejos de recomponer ese retroceso, tampoco se acerca a empatar la proyección inflacionaria de 2021.
  • Las cuotas, que serán en su inicio no remunerativas, se irán incorporando al salario a costas del sueldo neto. Por lo tanto, el incremento porcentual será menor.
  • La recomposición fraccionada implica la inevitable pérdida de poder adquisitivo contra la inflación, que se acumula con el correr de los meses en paralelo a las cuotas. Como agravante, lo firmado le confiere a las empresas el derecho de declararse en crisis y diferir los pagos.
  • A pesar de que la ley 27.555 que regula el Teletrabajo está vigente desde el 1 de abril, las empresas siguen sin asumir costo alguno. Lo firmado en paritaria pauta una comisión para tratar el tema recién en julio, casi un año y medio después de que la mayoría de les compañeres de prensa escrita tuvieron que adoptar esa modalidad.

El texto de la comisión directiva del SiPreBA luego de señalar que “el 80% de les compañeres en la categoría testigo de “redactor” cobra menos de $62.958, el umbral que define lo mínimo para cubrir una canasta básica total (CBT)” finaliza subrayando que “ejercer un periodismo de calidad con libertad de expresión requiere de salarios dignos. La tarea de informar no puede transformarse en una “vocación” mal remunerada, como sueña algún empresario que precariza nuestro trabajo”.

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